Es insólito que nosotros
Defendamos, el estomago de un
Mal alimento, y no defendamos
La mente, de un mal pensamiento.
No podemos evitar las tentaciones, pero
Si vencerás en el nombre de Jesús
La virtud no consiste, en abstenernos
Del vicio, si no en no desearlo.
El cristiano que no está, en paz con sus
Hermanos, jamás puede estar en paz, con
Su Padre.
No podemos evitar el envejecimiento, pero
si podemos evitar el
Ancianizarnos, espiritualmente.