NO
TE OCULTES MAS
LA DISFUNCION NO ES UNA EXCUSA
“y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo. Y
aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levanto contra su hermano
Abel, y lo mato”
En génesis, el libro de los principios, encontramos la
primera pelea en la primera familia entre los dos primeros hermanos.
Encontramos nuestro primer ejemplo de disfunción.
Difícilmente puedes escuchar una conversación en los
programas de entrevistas televisivas, sin que oigas a la gente frecuentemente
pecaminosa: Vengo de una familia disfuncional. Como si esto supusiera una
excusa legitima.
Oh, las palabras suenan verdaderas. La excusa, sin
embargo, es pobre y sin valor alguno. La
razón por la cual las palabras suenan verdaderas es porque todos tenemos un
grado de disfunción en nuestras vidas. La razón que in valida la excusa es
esta: todos venimos de familias disfuncionales. Toda familia tiene un elemento
disfuncional intrínseco. Todos somos descendentes a Adán y Eva, nuestros
primeros ancestros que cayeron de un estado de perfecta funcionalidad. De modo
que, si toda persona está predispuesta a padecer de alguna disfunción. Adán y
Eva llegaron a ser los padres de la primera familia disfuncional. Ellos dieron origen a un hijo disfuncional, Caín.
Asesinato y violencia botaron entre los dos primeros hermanos.
El mismo espíritu criminal existe actualmente en el
mundo. Nos parece perfectamente obvio hecho
de que todos somos hermanos.
El mismo espíritu criminal existe actualmente en el
mundo. Nos parece perfectamente obvio el hecho de que todos somos hermanos que
todos tenemos la misma sangre corriendo por nuestras venas pero todos caemos en
el mismo espíritu de competencia de cortesía y celos que manifestó Caín.
Algunas personas tienen algunas veces un espíritu asesino
de “destruyendo a él antes que me destruya a mi” mientras que al mismo tiempo
dan una apariencia de cortesía y cooperación.
Ha y que enfrentar la realidad diaria que algunos de tus
problemas derivan del hecho de que hay alguien que no simpatiza con tu éxito.
Las guerras internacionales han
resultado por los celos de un hombre debido al éxito y posesiones que otro ah
alcanzado. ¿No es asombroso que las posesiones que las pequeñas escaramuzas que
enfrentamos diariamente en nuestra vida personal, proceden de la misma
raíz de celo?
Tu actitud hoy es algo que está totalmente bajo tu control. Tú
decides. Tú escoges si vas a manifestar prejuicios, enojo, odio, amargura,
resentimiento. Esta en tu poder la decisión acerca de que pensaras y como
reaccionaras.
No culpes por tus acciones a tu familia disfunción acerca
de que pensaras y como reaccionaras.
No culpes por tus acciones a tu familia disfuncional. No
culpes por tus acciones en una actitud que nazca de una fe funcional.
Rehúsa achacar tus circunstancias a la disfunción
humana. En lugar de eso, pon tus circunstancias en el camino de la función de gracias y amor de Cristo.